Evangélicos en Argentina

Posted on

Radiografía del poder de pastores e iglesias evangélicas para influir en las elecciones

24-junio-2019 EL CLARÍN (Argentina)

Las iglesias evangélicas argentinas salieron a disputar un espacio político en las trascendentales elecciones de este año. Una investigación de Periodismo Para Todos mostró el crecimiento de la influencia de la religión sobre la política.

La relación entre los evangélicos y el poder político es antigua, pero lo que antes se manejaba de manera sutil, ahora se discute a viva voz. La disputa por la ley de interrupción legal del embarazo apuró los tiempos y los hizo tomar conciencia de que para defender sus intereses necesitan bancas.  Se estima que reúnen a 9 millones de fieles, un paquete enorme de votos por los que se pelean todos, tanto Cambiemos como el PJ.

Tienen acción social en el territorio y una enorme presencia en los barrios humildes del GBA, llegando adonde muchas veces el gobierno y los partidos no llegan. No solo se trata de religión. “Allí uno recibe apoyo escolar, aprende a cocinar, a cantar, aprende nuevas tecnologías. Son santuarios, lugares de refugio. Eso determina un activismo y una contención emocionalmente muy fuerte”, sostiene el historiador Jorge Ossona.

“Estamos con la gente, estamos en la calle, estamos en todas partes. Acá en La Matanza no podés doblar una esquina sin ver una iglesia evangélica”, dice Gabriel Ciulla, pastor de la Iglesia Camino de Vida y subsecretario de Culto de La Matanza.

Juan Zuccarelli, pastor de la Iglesia Cristo La Única Esperanza, sostiene que lo de las iglesias evangélicas “no es una religión, no es algo frío, algo de lejos, es de contacto, somos una familia. Estoy cuando nacen, cuando se casan, cuando se mueren…”.

Según Ossona, las iglesias pentecostales son “un universo muy variado de cultos cuentapropistas, donde cualquiera puede ser pastor. Neopentecostalismo para todos. Para jóvenes, presos, inmigrantes, mujeres sin marido. Hay un programa mínimo que comparten: oposición al aborto, al divorcio, a la homosexualidad…”

Los pastores aún están definiendo y organizando la manera en que disputarán poder. Lo que está claro es que el espejo en el que se miran es Brasil. Allí las iglesias evangélicas representan a un 30% de la población y sobre 500 bancas en el Congreso controlan 100. “Nos llevan 40 años de participación política”, reconocen los pastores argentinos que intentan recuperar el tiempo perdido.

“Muchos están empezando a militar, a trabajar a incursionar en la política. Quizás tenemos que definir internamente si puede seguir siendo pastor y dedicarse a la política”, sostiene el Pastor Pedro Ibarra de la Iglesia del Puente.

En trabajo conjunto con el Ministerio de Desarrollo Social, las iglesias evangélicas distribuyen por mes 50 mil kilos de alimentos en el GBA y 6 mil en Mar del Plata.

“Para mí sería fundamental (incursionar en la política). Si hablamos que los evangélicos somos el 10% de la población, deberíamos tener 25 diputados”, argumenta Eduardo Zens, pastor de la Iglesia Centro Familiar Cristiano.

Rosario es la capital del boom evangélico. La ciudad tiene 750 templos y más de 160 mil fieles. En la reciente elección santafesina, dentro de la lista que encabezó Amalia Granata fue elegido como diputado provincial Walter Ghione, pastor e hijo y nieto de pastores. Con un mensaje “Salvemos las dos vidas” obtuvieron casi 300.000 votos. Y contaron con más de 600 fiscales evangélicos y católicos. “Hacemos lo que no puede ningún partido: nosotros podemos hacer campaña sin dinero”, contó Ghione.



Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *